La educación para el trabajo
La educación para el trabajo en la cultura fenicia se transmitía de
padres a hijos. Cada familia de acuerdo a la actividad que realizaba
educaba a sus hijos, por ejemplo los fenicios estaban organizados en
corporaciones profesionales de albañiles, carpinteros, herreros,
pescadores, marinos, curtidores, alfareros, tejedores y demás
actividades. Los niños y jóvenes ingresaban al taller de sus padres como
aprendices y a lo largo del tiempo llegaban a ser maestros.
La educación filosófica
Las familias y los gremios estaban regulados por el palacio o por el
templo, de allí recibían instrucción filosófica y religiosa en relación a
como ser una persona útil a la sociedad, que pasos seguir para poder
casarse, qué sería adecuado hacer en la vida antes de morir, etc.
La educación de niños y jóvenes
Instrucciones para convertirse en hombres y mujeres
La siguiente es una interpretación de cómo la mitología de los ciclos de
Baal podrían haber influido en un proceso ético educativo “a imagen y
semejanza de los dioses” para que las y los jóvenes puedan constituirse
como miembros útiles y reconocidos por su sociedad a través de
desarrollar conocimientos, habilidades y aptitudes que les permitieran
transitar de un estado caótico y dependiente hasta un estado creativo y
enriquecedor. Este proceso sería evaluado por figuras de autoridad.
Para convertirse en hombres y mujeres hay retos a vencer, estos son:
1. Luchar contra el caos y convertirse en constructor de vida
2. Buscar pareja
3. Tener reconocimiento social
4. Unirse y reproducirse
5. Llevar adelante la vida diaria y prepararse para la muerte
6. Celebrar la vida
1. Lucha contra el caos: la capacidad de trabajar y producir.
El varón debe luchar contra el caos y demostrar que es capaz de
construir vida, que ha organizado sus conocimientos, sus herramientas,
que es capaz de ser descubridor, creador y de vencer el desorden y crear
una forma organizada de vida.
2. Búsqueda de pareja
La mujer se lava, se arregla y se maquilla, se perfuma y se dispone a seducir al hombre.
La mujer busca al hombre para que este no se dedique a causar problemas,
para que muestre benevolencia con sus semejantes. Para que el hombre
ponga los pies en la tierra. La mujer busca al hombre para que entre
ambos se regocije toda la carne y se llene de gozo toda el alma.
Cuando la mujer está arreglada va en busca del hombre, pero no va a la
casa de sus padres, lo busca en donde él está trabajando, porque el
hombre no debe estar en casa de sus padres sino salir a trabajar si es
que quiere formar pareja. Ella se pasea hasta que llega a llamar su
atención. El hombre concentrado en sus actividades alza los ojos y si
sus ojos ven a la más hermosa de las mujeres, a sus pies se postra, la
alaba y la bendice.
3.-Logro del reconocimiento social
El Joven habla con su amada y le dice que él ya es capaz de trabajar y
dar sustento. La mujer se siente halagada de los logros y los regalos
del hombre, sin embargo le dice que el siguiente paso es que la
superioridad – el rey o sacerdote- le reconozca su esfuerzo y le otorgue
una casa. El papel de la mujer es mostrar ante la autoridad y sus
padres los logros alcanzados por el novio, abogar por él de que ya es un
hombre y entonces se dirige a la casa del rey y le exige que reconozca
que el joven es apto para proporcionar casa, seguridad y alimento,
bienes que la mujer se encargará de administrar. El rey escucha la
demanda y a continuación envía a la joven mujer a platicar con su esposa
-la reina-, ambas se retiran a una habitación a deliberar, la joven
defenderá sus puntos de vista y la reina escuchará y dará su opinión,
cuando ambas mujeres se han puesto de acuerdo anuncian su veredicto al
rey. Si el joven novio es merecedor del reconocimiento social, el rey lo
anuncia ante la sociedad y entre todos construyen su casa y realizan
ahí una gran fiesta. Este es el casamiento fenicio.
4.- Unión y reproducción
Hombre y mujer deben reunirse con halagos, alabanzas y bendiciones
mutuas. El nacimiento de un hijo debe ser recibido con alegría.
La mujer se lava, se arregla y se maquilla, se perfuma y se dispone a seducir al hombre.
El hombre alza los ojos ante la más hermosa de las mujeres, a sus pies se postra, la alaba y la bendice.
Entonces pueden acariciarse, abrazarse, besarse, unirse, concebir.
Cuando llega el momento del nacimiento, el hombre debe ir a casa de su
padre a esperar. La mujer se aleja, tal vez a una cueva, tiene al bebé y
lo amamanta. Posteriormente, a los cuarenta días, va a buscar al hombre
y le anuncia alegre: la buena nueva de dios. El hombre entonces muestra
su alegría, victorioso.
5.- Construcción de la vida diaria y preparación para la muerte
En colaboración constante, el hombre y la mujer, deben pasar la prueba
permanente por la vida. La vida se transforma en una victoria que debe
renovarse constantemente. La vida no es sino que deviene, es un proceso
de constante esfuerzo y superación. La mujer crea la vida y el hombre la
defiende. Sin embargo la vida no debe ser un drama sino que hay que ser
productivo y gozar de lo que la vida ofrece. Alabar a los dioses,
educar a los hijos, crear riqueza, disfrutar, para luego morir en paz.
Así exponemos lo que expresan documentos de la ciudad de Ugarit de 1500 a.C..
"Cuando mueras dicha tendrás. Pero debes vestir de blanco, blanco como
la luna, como las estrellas. Debes llegar a la muerte habiendo creado
abundancia, antes de morir debes haber disfrutado del banquete de los
dioses, haber comido reses lechales, filetes de cebón a la sal, bebido
vino en cáliz, en copa de oro sangre de cepas, en copa de plata cáliz
tras cáliz, el mosto de la casa, hasta agotar las existencias
Antes de morir ama a una joven, yace con ella setenta y siete veces,
conciban un hijo, un hijo que tenga tu fuerza, un hijo que se siente a
tu diestra. Conciban una hija, una hija que sea la alegría de la vida.
Pon a tus hijos en la casa de los dioses de la Tierra, para que sean
sabios y sean benevolentes.
Cuando hayas hecho todo eso, toma todos tu recuerdos, dirige tu cara
hacia la montaña, levanta la montaña con tus manos y desciende a la
morada última, cuéntate entre los que bajan a esa tierra y sabrán los
dioses que has muerto.” (Retomando textos traducidos por Del Olmo Lete,
Gregorio, bibliografía 4 de la columna derecha de este blog)
6.- Celebración de la vida
En general los aspectos de la
educación fenicia hablan de trabajar para la construExcción de la vida diaria y
celebrarla subrayando momentos importantes como:
Cuando puedes entender y
organizar tu vida.
Cuando eres capaz de generar
casa, seguridad y alimento.
Cuando creces y eres reconocido
como hombre o mujer.
Cuando hombre y mujer
trabajan juntos por la vida.
Cuando nace un hijo para
sentarse a la diestra de su padre.
Cuando nace una hija para
derrotar a la muerte.
Cuando has hecho de tus
hijos personas sabias y benevolentes.
Cuando eres útil a tu
comunidad.
Cuando has generado
abundancia.
Cuando has disfrutado de los
alimentos y el vino.
Cuando llega la vida de la
primavera después de la muerte del invierno.
Cuando alabas a los dioses.
Cuando caminas en paz hacia
la muerte.